Catamayo, Política y Unidad

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Son las fiestas de Catamayo y han cruzado cuatro décadas desde que se hizo cantón. Ha sido bautizado de diferentes formas y esto nace gracias a su clima y el sol que brilla todos los días, cuando el astro rey no sale como que algo falta en este valle; su paisaje natural que se lo puede ver, grabar, fotografiar, disfrutar o simplemente contemplar, hacen de Catamayo esa tierra que cuando la visitas o naces y te has ido; siempre quieres volver, su patrimonio gastronómico es único, con menos de un dólar puedes disfrutar de un tamal, una huma, un delicioso roscón o esponjoso bizcochuelo, un helado de coco y leche o en fin lo que desees comer, a mí me gustan las espumillas, es una crema con un dulce especial en conos de helados que disfruto con mis hijas y espero nunca terminen esos emprendimientos de mujeres humildes pero que dan mucho sentido a la vida y endulzan el paladar, me estoy olvidando de los raspados, hielo rayado con miel, ni que decir de la cecina y una infinidad de platos como asados, mariscos o comida rápida; en pocas palabras, hacer dieta en el valle es un poco complicado con una gastronomía popular tan exquisita.
Catamayo aparte de ser uno de los cantones más jóvenes de la provincia de Loja, es pionero emprendiendo y creciendo poblacionalmente; claro está, se debe a muchos factores etnográficos y naturales propios del lugar e incluso patrimonial, en resumen, es un puerto seco, pero sin su gente de empuje y ganas de querer triunfar nada sería posible.
Hace días escribí un “tuit”: “Catamayo no solo brilla por el sol, también brilla por sus hijos”, ya no es de sorprenderse que hijos de esta tierra triunfen a nivel nacional e internacional o a nivel iberoamericano y esperemos que muy pronto a nivel mundial, nos encontramos cruzando barreras que hace poco tiempo se veían imposibles, Catamayo crece sí y no deja de crecer en todos su campos ¡pero algo si me preocupa de sobremanera¡ y espero estar equivocado pero no por eso puedo dejarlo de escribir o pensar; porque como dice el viejo pensamiento: “aquel que no expresa lo que piensa está en la misma calidad del que no pensó”; Catamayo se ha estancado en su crecimiento político, nos faltan personajes más comprometidos, preparados, ojo que no me refiero únicamente a llenarse de cartones que los llaman títulos, me refiero a personas que nos representen con una formación integral cosa que muchas de las veces no enseñan en las Universidades, con valores y principios alejados del oportunismo y silencio ante las injusticias que aquejan a este pedacito encantador llamado el valle azucarero o Catamayo bonito.

Consuelo de bobos podría ser que no es un problema local sino nacional, Aristóteles decía aproximadamente por el año IV A.C que el político electo era “parte jefe y parte súbdito”; pero que parece que hoy por hoy se hace alguien más político para salir de sus necesidades económicas que por servir a su gente; por ende, esperan el momento propicio para negociar, tranzar o simplemente acomodarse al poder de turno, luego esto se justifica de cualquier modo, al fin y al cabo se lo puede tapar con la ley, el oportunismo o simplemente con poner cara de zuela decían nuestros ancestros; y por ende siguen haciendo fila para recibir “el salario de la vergüenza” como en algún momento lo escribió Saramago en su obra clásica “Ensayo sobre la ceguera” tratando de interpretar un mundo y una sociedad de ciegos, donde lo malo y lo bueno afloraba por la naturaleza propia de cada ser humano.
El mismo Aristóteles filosofo de Grecia también manifestaba que la moral a su juicio solo podía pertenecer a la ciencia de la política; puesto que la misma no se la podía practicar si el ser humano que pretendía hacerlo no estaba dotado de ciertas cualidades; es decir, que una persona para poderla ejercer “debía ser un hombre de bien” y que por ende esto equivalía a ser “un hombre de virtudes”; por lo que, para ser un político necesariamente se debe ser un hombre virtuoso, en la actualidad para ser inclusivos “una mujer de virtudes”; es decir, una mujer virtuosa, siendo el verdadero fin de la virtud hacer el bien y lo contrario aquello es el mal, representado el mal por el vicio, la liberalidad siendo esta el medio entre la prodigalidad y la avaricia, dos pasiones que tienen por objeto el dinero; y que del hombre dependía escoger entre esos dos caminos y que para el primero la virtud existía la alabanza del pueblo y para el segundo los despreciables y viciosos existía la represión.
El mismo filosofo en otras de sus obras enseñaba que “la humanidad está en constante búsqueda de aquello que considera bueno” y creo que Catamayo no se cansa, ni se cansará de buscar en la asociación política esa búsqueda de lo bueno y virtuoso; es verdad, nos hemos estancado en producir políticos serios, honestos y que se desprendan del oportunismo y que busquen sus propios beneficios, pero “nunca es tarde para mañana” dice el viejo adagio popular, puesto que ni bien llegan al poder tratan de buscar el acomodo para si mimo o para su entorno más cercano o los amigos de la trinca, ya que lo propio debería ser, siempre decidir lo mejor para el pueblo y este pueblo decidir lo mejor para los demás.

Hoy por hoy hemos emprendido en un caminar tratando de unir a quien pretenda hacer política, hemos escuchado y los seguiremos haciendo a personas hombres y mujeres que día a día aportan con sus propuestas y formas de ver la realidad, algunos programas digitales se han realizado escuchando esas propuestas, lo mismo que ayuda a encumbrar un derrotero a seguir, determinando cuáles son las necesidades de la gente y como se los podría lograr, luchando y realizando una unidad de personas y líderes, de jóvenes y adultos, de profesionales y no profesionales con voluntad de bien común y desarrollo, no en beneficio de una persona o candidato sino de la comunidad toda, debemos hacer un proyecto íntegro y sostenible a varios periodos y años a futuro; dividir a una sociedad en momentos como estos no tiene sentido, el sentido debe estar en fortalecer la unión, claro está, esto le incomodará a más de un ególatra o quien mire solo sus propios intereses, es que no siempre los políticos son virtuosos o buenos, muchos son viciosos y avarientos al dinero y al poder como enseñaba Aristóteles, para ellos no es la verdadera política peor la unidad y por eso reciben del pueblo la represión a sus vicios y su ambición personal, será el castigo de ese mismo pueblo en el sufragio popular los que digan si un político en funciones fue virtuoso o simplemente vicioso, así de sencillo.
Loor a Catamayo en sus fiestas, que la unidad sea el derrotero a seguir y que Dios bendiga a nuestro pueblo.

Marlon Ernesto Chiriboga Aguirre
Condecoración Mérito Literario “Pablo Palacio” Prefectura Loja -2018
Mayo/2021