Con el fin de promover, defender, y exigir la protección de los derechos de los habitantes de los sectores rurales de los cantones Calvas, Gonzanamá y Espíndola; se posesionaron a 26 defensoras/es comunitarios que han sido parte de un proceso formativo apoyado por Plan Internacional.
Los Consejos Cantonales de Protección de Derechos de los cantones Calvas, Espíndola y Gonzanamá fueron quienes a través de un reconocimiento público y la entrega de una credencial les otorgaron la figura de defensores comunitarios de manera formal, se tomó el respectivo juramento para promover y difundir los Derechos Humanos y sociales en sus comunidades; el mismo que estuvo a cargo de Iván Villarreal, secretario técnico del Consejo de Igualdad Intergeneracional.
Freddy Romero, gerente de Plan Internacional mencionó que lo importante de las defensorías comunitarias es la legitimidad en sus comunidades y que la gente los reconozca como un grupo especial que no está para acusar, si no para promover los derechos.
Flora del Carmen Cañar Jiménez, defensora comunitaria, indicó el compromiso que tienen como defensores comunitarios para ser la voz de sus comunidades, “estoy convencida de que niñas, niños y adolescentes tienen los mismos derechos humanos que los adultos. Los defensores vamos a visibilizar y transformar la realidad de este grupo” indicó.
Patricia Soto, secretaria del Concejo Cantonal de Calvas, indicó que la propuesta es innovadora e integral, que va a permitir mejorar la calidad de vida a los niñas, niños y adolescentes. “queremos seguir comprometiendo nuestro esfuerzo para generar condiciones de vida digna para los usuarios y para toda la población”
En el evento se destacó el trabajo interinstitucional para la protección y garantía de los derechos de los grupos de atención prioritaria con la participación de varias instituciones. Plan Internacional se comprometió a seguir apoyando al fortalecimiento de este tipo organizaciones comunitarias que contribuyan al ejercicio efectivo de los derechos humanos.
