La Venerada Imagen de la Virgen de El Cisne, después de permanecer 36 días en la ciudad de Loja, inicia su trayectoria de retorno a su Santuario ubicado en la Parroquia de su mismo nombre «El Cisne».
Historia y devoción:
La Venerada Imagen de la Virgen de El Cisne ha acompañado al pueblo católico durante aproximadamente 429 años. La Virgen escogió la pequeña aldea de la actual Parroquia El Cisne para convertirla en un lugar de fe, peregrinación y encuentro con Dios a través de su madre.
El milagro de la aparición de la Virgen María data del 12 de octubre de 1594, cuando se le apareció una niña que pastoreaba sus ovejas. En ese momento, la comunidad enfrentaba una terrible sequía y hambruna, y la Virgen pidió a la niña que transmitiera a los mayores la construcción de una iglesia en ese lugar. A cambio, prometió quedarse con ellos y no abandonar las tierras. Los caciques del lugar viajaron a Quito para conseguir la imagen de la Virgen, a quien rendirían culto.
La Venerada Imagen de la Virgen de El Cisne fue tallada por Diego de Robles, un escultor español que vivía en Quito en ese entonces. Desde entonces, la imagen de la Virgen se ha convertido en un icono de fe que ha trascendido fronteras. Los miles de devotos que acuden cada año a su santuario relatan numerosos prodigios alcanzados por la buena madre.
Importancia y festividades:
La importancia de la Virgen de El Cisne es tan alta que el Libertador Simón Bolívar decretó en 1829 que se concedió el privilegio de una feria en su honor desde el 10 de agosto hasta el 12 de septiembre de cada año. Los días principales de celebración son el 15 de agosto en su parroquia natal y el 8 de septiembre en la ciudad de Loja. Cada año, la venerada imagen emprende su caminar hasta la ciudad de Loja, cumpliendo tres trayectos: El Cisne – San Pedro de la Bendita, San Pedro de la Bendita – Catamayo y Catamayo – Loja.
Regreso al Santuario:
Este 1 de noviembre, la venerada imagen de la Virgen de El Cisne emprende su peregrinación de retorno a su Santuario. Durante su trayectoria, la Virgen permanecerá en Catamayo del 1 al 6 de noviembre, luego continuará su peregrinación hasta la parroquia San Pedro de la Bendita, donde pernoctará hasta el 17 de noviembre, fecha en la que finalmente llegará a su Santuario.
Durante su estadía en la parroquia San Pedro de la Bendita, la imagen recibe a cientos de peregrinos de diversas partes del país. Se realizan manifestaciones de cariño y fe a través de actos sociales, culturales y artísticos organizados por los devotos. Entre las tradiciones destacadas se encuentra la quema de castillos y juegos pirotécnicos, así como el compartir de un exquisito chocolate con pan después de los actos religiosos.
El 17 de noviembre, la Sagrada Imagen de la Virgen de El Cisne sale desde el templo matriz para presidir la eucaristía de despedida en el parque central de San Pedro de la Bendita. Luego, inicia su peregrinación hasta su santuario, haciendo dos descansos en el camino. Al llegar al Santuario, se realiza un imponente recibo con la participación de autoridades eclesiásticas, civiles, devotos y peregrinos.
Finalmente, la Sagrada Imagen está colocada en su trono en el altar mayor de su Santuario, donde permanecerá hasta el próximo año, bendiciendo a todos sus hijos que la visitan durante todo el tiempo.
Redacción: Jonathan Vele