La Venerada Imagen de la Virgen de El Cisne se encuentra actualmente en su último periplo hacia la ciudad de Loja, luciendo un impresionante ajuar con motivo de las festividades del Clero, en conmemoración de sus 160 años de vida eclesiástica.
En un gesto significativo, la diócesis ha invitado a los peregrinos a unirse a esta procesión vistiendo prendas blancas, con el propósito de pedir por la paz en todo el Ecuador y en el mundo entero.
Esta peregrinación adquiere un especial significado, ya que busca promover la armonía y la tranquilidad en un contexto global, donde la paz es un anhelo compartido por todos.
La Virgen de El Cisne, venerada y adorada por numerosos fieles, se convierte en un símbolo de esperanza y unidad en estos tiempos desafiantes. Su presencia y protección son invocadas para que la paz reine en cada rincón de nuestra nación y se extienda más allá de nuestras fronteras.
La fe y devoción hacia la Virgen de El Cisne son evidentes en la multitud de peregrinos que, con fervor y esperanza, acompañan su periplo hasta la ciudad de Loja. Este evento trascendental nos invita a reflexionar sobre la importancia de la paz y la necesidad de trabajar juntos para alcanzarla.
Que esta peregrinación sea un llamado a la solidaridad, a la reconciliación y a la búsqueda de soluciones pacíficas para los desafíos que enfrentamos como sociedad. Que la Virgen de El Cisne, en su infinita bondad, escuche nuestras plegarias y nos guíe hacia un mundo lleno de armonía y amor.
El padre Carlos Guamán celebró la eucaristía de despedida en los exteriores de la iglesia matriz María Auxiliadora. El evento tuvo lugar a las 5h00 y contó con el resguardo de cientos de fieles que caminaron junto a la sagrada imagen. Estos fieles llevaban en su corazón el firme anhelo de obtener un milagro o simplemente expresar su gratitud por los favores recibidos bajo la intersección de la madre del hijo de Dios.
¡Unámonos en esta peregrinación por la paz y hagamos de este periplo de la Virgen de El Cisne un símbolo de esperanza y unidad para todos!»