El CPCCS debe pedir a la Asamblea que apruebe una Ley Interpretativa, o, lo que en realidad corresponde, solicitar a la Corte Constitucional que realice un pedido de interpretación sobre la Ley de la Contraloría, para que pueda nombrarse un Contralor Subrogante Encargado y que la institución no quede en acefalía, mientras se lleva a cabo el proceso de selección para el nuevo Contralor.
El CPCCS debió ‘haber hecho este deber hace mucho tiempo’, pero no lo hizo, y hoy vemos los resultados.
En fin, debe nombrarse un nuevo Contralor General del Estado (ojalá un probo funcionario); llevarse a efecto el juicio político contra Pablo Celi (y para muchos más en los temas de corrupción); y además es JUSTO Y NECESARIO, TANTO COMO OBLIGATORIO, que el CPCCS haga bien su trabajo, según el principio por el cual fue creado (como una institución fundamental para garantizar los derechos ciudadanos).