Para este año nos planteamos algunos propósitos personales, gremiales y alguno que otro sueño por cumplir.
El crecer personalmente involucra esfuerzos, disciplina, interés, y muchas ganas de hacer lo que te propones; es decir demostrar un interés cierto y real, para que ello se cumpla solo hace falta un elemento, ser honesto consigo mismo.
Cómo ciudadanos estamos en el deber propio de hacer y contribuir para el desarrollo, crecimiento y buen nombre de nuestra ciudad, no hace falta mucho si inicia por el frente de su casa, por poner en orden sus deberes tributarios y mantener los principios de buena vecindad.
En cuanto a el sueño de cada ciudadano y de los pueblos, estos se van construyendo con la suma de los aportes anterior mente citados, más la sintonía de nuestras autoridades con estos principios que no está por demás citarlos: Honestidad consigo mismo y el de buena vecindad.
Anhelamos como el que más una ciudad prospera, ordenada, pujante, y el deseo de todos, la mejor ciudad para vivir.